Grupo Z 212 concluye el «primer capítulo» de su campaña pacífica
El grupo Z 212, que desencadenó protestas masivas este año, anunció el final del «primer capítulo» de su campaña pacífica, considerándolo un «éxito fundacional» que ha reavivado la conciencia política de miles de jóvenes.
En un comunicado oficial publicado en la plataforma Discord, el movimiento confirmó que entra en una etapa de reorganización para lanzar el «segundo capítulo», advirtiendo que la lucha «no se ha detenido ni se detendrá».
La organización «Gen Z 212» comenzó como un grupo informal en el servidor de Discord el 18 de septiembre, y su número de miembros creció de menos de mil a aproximadamente 250,000 para el 7 de octubre, impulsada por el descontento juvenil ante el aumento de la tasa de desempleo, que alcanzó el 13.3% en 2024, así como por la mala calidad de los servicios públicos y la corrupción.
Las convocatorias digitales pronto se transformaron en protestas en varias ciudades marroquíes, exigiendo reformas radicales como la liberación de los prisioneros políticos, garantizando derechos básicos en salud y educación, y la rendición de cuentas a los «saqueadores de fondos públicos». Sin embargo, las protestas se tornaron violentas a principios de octubre, resultando en cientos de heridos y al menos dos muertos a manos de las fuerzas de seguridad, que calificaron el incidente como «defensa propia».
En el comunicado oficial, firmado electrónicamente para garantizar la seguridad, los líderes del movimiento describieron la primera fase como «un éxito que ha demostrado la existencia de una generación joven consciente de los asuntos de su país y que ha logrado encender un verdadero debate nacional sobre las prioridades de los marroquíes». Añadieron: «Hemos logrado romper el muro del silencio, y hacer escuchar nuestra voz y sufrimiento a nivel nacional e internacional, y lo más importante, hemos reavivado el espíritu de conciencia política y de lucha en miles de jóvenes de esta nación».
El comunicado también destacó que el próximo periodo estará dedicado a «reorganizar filas, a una reflexión colectiva profunda y a una autocrítica constructiva», con el fin de lanzar una segunda etapa «más fuerte, efectiva y organizada». En un mensaje dirigido a «quienes apuestan por nuestra retirada», el movimiento enfatizó: «Esta pausa organizativa es solo para regresar con más fuerza e impacto. Nuestra lucha continúa, nuestra determinación es firme, y seguiremos trabajando en todos los frentes hasta lograr todas nuestras demandas justas y legítimas, encabezadas por la liberación de todos los prisioneros, y la garantía del derecho a la salud, educación y dignidad, así como la eliminación de la corrupción y la rendición de cuentas a los saqueadores de fondos públicos».
Este anuncio se produce en medio de una notable disminución de las manifestaciones convocadas por el movimiento, que ahora se limitan a decenas de personas.



