Niegan los acusados de disturbios en Larache
Todos los acusados de los disturbios ocurridos en la ciudad de Larache tras las manifestaciones del movimiento Generación Z el 1 de octubre han rechazado las acusaciones en su contra, afirmando que no tienen relación con dicha generación ni participaron en las protestas.
Durante la discusión del caso en la corte de apelaciones de Tánger, los detenidos afirmaron que todas las acusaciones son falsas y que firmaron actas sin haberlas leído.
Los 17 jóvenes manifestaron que fueron arrestados en lugares alejados de las manifestaciones y que las calles estaban tranquilas, desmentiendo así las acusaciones de lanzar piedras a la policía, vandalizar instituciones y agredir la residencia del gobernador.
La defensa de los acusados argumentó que los jóvenes están siendo juzgados únicamente basándose en los informes policiales, que, según dicen, contienen datos contradictorios.
Uno de los abogados mencionó el caso de Munir Q., quien fue recibido en la comisaría a las diez de la noche, después de su arresto, antes de que estallaran los disturbios. Sin embargo, en otro informe se le acusa de haber incendiado una motocicleta de un representante de la autoridad a las once y media de la noche.
El abogado señaló que la situación de este joven pone en duda la validez de los informes, ya que no es lógico que se le acuse de un delito mientras estaba bajo custodia policial.
